
El Hiyab: ni mi cuerpo, ni mi elección
Sin embargo, parece cada vez más que esa distancia con el hiyab: ya sea rechazando abiertamente a ponérselo, llevándolo de una manera que todavía muestra los partes sustanciales de la forma de uno, o eventualmente quitándoselo después de practicarlo una vez, se expresa no solo en sentimientos de indiferencia, sino en rectitud moral. Continue reading El Hiyab: ni mi cuerpo, ni mi elección